Centro de Estudios Locales de Andorra
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Paraje de la fuente Moreno (Foto CEA Ítaca-José Luis Iranzo) |
A esta ruta se le puede dedicar entre una y dos horas en función del tiempo que dediquemos a las paradas.
Discurrirá a la ida por el valle de val de Molinos hasta la fuente Moreno, para retornar por la parte superior de la cornisa desde la que contemplaremos Andorra, su entorno y el trazado de toda la ruta.
El paseo discurre a una altitud media aproximada de 700 m.
Tomamos como punto de partida la plaza del Regallo, que toma su nombre del río que pasaba por allí antes de ser encauzado y cubierto por la actual avenida Dos de Mayo. En esta zona confluía con el arroyo de val de Molinos que es el que vamos a pasear.
Salimos de la plaza por la calle Cerrado Vitorina hasta llegar a la zona escolar que bordeamos dejando a la derecha, hasta el colegio Gloria Fuertes. En ese momento dejamos el asfalto y nuestra ruta se convierte en un camino.
Pocos metros más adelante, junto al segundo poste, comienza a la derecha nuestra senda entre dos bancales en dirección suroeste; al final de estos encontramos una bifurcación, continuamos de frente. A muy pocos pasos cogeremos la senda que bordea el campo de almendros que pasa junto a una pequeña pared de arenisca a nuestra izquierda.
A partir de aquí podemos ir observando vegetación silvestre y autóctona junto al camino. A nuestra derecha vemos campos de cultivo con almendros ocupando el fondo del valle, junto con algún huerto. En las laderas de la montaña hay coscojas, olivos, almendros, sabinas y encinas sueltas.
La primera parada la vamos a hacer en una pequeña cantera que hay en la pared de arenisca de la izquierda con las marcas de los punteros que sirvieron para extraer los trozos de roca que se utilizaron en la construcción.
En la parte superior podemos ver una coscoja cuyas raíces, con su crecimiento entre las grietas, realizan una labor de rotura de la roca a la que se llama bioclasticidad.
Otro arbusto abundante es la aliaga cuyas flores amarillas decoran el paisaje durante los meses de marzo y abril. También encontramos algunos ejemplares de rosal silvestre, llamado familiarmente escaramujo o tapaculos.
Entre las plantas herbáceas que vamos observando a lo largo del camino destacan las siguientes: ontina, bufalaga, lastón, diente de león, rabaneta blanca y amarilla, llantén menor, nazareno, tomillo, la vivorera, siempreviva , lino, , espliego, lechetrezna...
Retomando la marcha, poco después llegamos a una gran encina que se vuelca sobre el camino. La encontrarás ya muerta, quizá debido a su edad o a alguna enfermedad. En las fotografías, hechas en la primavera del 2000, puedes observar que todavía vivía. Hasta ahora había sido uno de los más bellos ejemplares arbóreos de las cercanías de Andorra.
A nuestra izquierda, en las laderas de la montaña, vemos pequeños bosquetes de pinos de repoblación. Al poco llegaremos a una zona con vegetación variada y frondosa, sobre todo en primavera y verano, donde podemos hacer una parada de observación. En la ladera de la izquierda vemos dos ejemplares de roble y un serbal o acerollo. En torno al cauce, por el que generalmente discurre algo de agua, se conservan restos de bosque de ribera caracterizado por especies más exigentes de humedad. En este enclave podemos ver algunos árboles como el olmo, el ailanto y el chopo.
La presencia de agua ha posibilitado que aparezcan especies características como las cañas; también crece abundante zarzamora. Si pasamos a finales de verano podremos dar buena cuenta de sus deliciosos frutos, las moras.
Dejando a la derecha un magnífico ejemplar de chopo ascenderemos hacia la izquierda para observar mejor otro tipo de roca distinto a los observados hasta ahora: conglomerados. Seguimos siempre por el sendero que se encuentra junto a la base de la ladera, ascendiendo valle arriba en dirección S. En seguida vemos formas erosivas de origen eólico.
En pocos minutos llegamos a la fuente Moreno. Aquí hay una pequeña chopera junto a una fuente que solamente deja de manar cuando se suceden algunos meses de sequía. El lugar presenta un aspecto más verde y fresco que el entorno circundante como consecuencia de esta humedad, lo que le ha convertido en destino de muchos paseos.
Cerca del agua encontramos hierbabuena, menta, margaritas, juncos y otras especies.
En la pared de la roca se aprecian dos higueras, árbol que podemos ver crecer en sitios inverosímiles. Los pájaros comen higos y con las heces depositan las semillas allí donde se posen, por la gran facilidad para que germinen, la higuera crece en cualquier lugar.
Con el agua de la fuente se llena un abrevadero para el ganado ovino, que desemboca en una acequia para regar los campos de cultivo que están más abajo.
Y aquí vemos otros ejemplos de erosión diferencial en la base de la ladera que constituyen el elemento característico de la Fuente Moreno, así como oquedades excavadas por el viento.
Iniciamos el ascenso a la parte superior del monte hacia la izquierda, en dirección E, para superar la pendiente de conglomerado calizo hasta alcanzar el collado, donde haremos una nueva parada de observación. Nos puede servir de referencia un montón de piedras retiradas de los campos de cultivo.
Desde aquí podemos contemplar en dirección sur el cabezo de Piagordo, cerro característico del término municipal. Hacia el suroeste el Cabecico Redondo y detrás de él los Montalbos. Hacia el norte está la Sierra de Arcos, donde se encuentra la explotación minera de carbón y al noreste la cantera de caliza del Estrecho. Se divisa también el extremo superior de la chimenea de la Central. Más adelante tendremos mejores vistas del pueblo y San Macario.
La vegetación predominantemente esteparia propia del clima continental semiárido que caracteriza esta zona, con veranos calurosos e inviernos fríos, está representada por tomillo, aliaga y bufalaga.
Iniciamos el regreso hacia el pueblo por la parte más alta del monte bordeando un campo de cultivo. A nuestra izquierda podremos contemplar el valle y en la ladera de enfrente la planta potabilizadora. Después de un pequeño descenso nos apartamos de la senda principal para ir hacia la izquierda. Tomamos una trocha entre rocas sueltas y de considerable tamaño para torcer a la derecha por la cornisa de rocas. Desde aquí tenemos una excelente vista de la primera parte de esta ruta, de San Macario y toda la localidad. La senda nos lleva en descenso hasta el "chalet de los franceses" donde seguimos hacia la derecha hasta la chopera de las Masadicas Royas, cruzamos el cauce del río Regallo y la pista nos lleva al principio de la calle Aragón para seguir por la calle Mayor, calle La Fuente y Pza. del Regallo.
EL CELAN (Centro de Estudios Locales de Andorra) tiene como objetivo la investigación y estudio de los diferentes aspectos de la realidad cultural de Andorra y su ámbito comarcal, así como la defensa del Patrimonio Artístico e Histórico.
La actual organización del CELAN fue aprobada en la Asamblea General de Socios de febrero de 2001. Los órganos directivos -como las de cualquier organización- son la Asamblea General de Socios y la Junta Directiva.
El Centro de Estudios Locales de Andorra (CELAN) comenzó su andadura en la primavera de 1999. Sus miembros fundadores proceden básicamente del Departamento de Geografía, Historia y Ciencias Sociales del I.E.S “Pablo Serrano” de Andorra y de la Universidad Popular de Andorra.